martes, 2 de marzo de 2010

COMPLACENCIA.

El poder de convocatoria que tienen l@s abuel@s se ha demostrado una vez más en la cita que teníamos los beniner@s en el Cerro de las Viñas.

Padres de niñ@s que en la actualidad tienen sobre los treinta y cuarenta años, que en cierta medida solo existe para ellos los recuerdos que sus abuel@s y padres les han trasmitido sobre Benínar destinaron el día entero a estar donde decían sus mayores. Había que acudir al llamamiento.

Para l@s niñ@s el estar en dicho lugar no existieron problemas puesto qué, pertenecen a una generación, la cual, se les ha educado a vivir sin el más mínimo complejo y para ell@s ya no existe el concepto “catet@” que tanto desencajaba a sus abuelos cada vez que salían de Benínar. Complejo que por ejemplo al padre del que escribe le duró hasta que murió. Nunca encontró temas de conversación con los que les había tocado de tertulian@s. “Los beninerill@s” actuales rápidamente se incorporaron a los juegos y más si tienen a su alcance una pila de arena y espacio para correr.

El tema primordial era encontrar argumentos o temas de conversación para esos padres que vivieron su niñez y juventud en sitios tan distintos y tan dispares como son los que viven en el Puente del Rio, Almería, o en Manresa Cataluña. Generación que aún “están amarrados”, la cuerda no se ha roto la que les une a Benínar ya que l@s abuel@s se han encargado que dicha unión no se rompa. Visto desde otro punto de vista, la generación que destinan un día para que sus padres (ya abuel@s) hablen sin prisas y sin pausa con sus paisan@s pero sobre todo encontrarse con el valle que les vio nacer, visto desde el Cerro de las Viñas.

A esta generación que se encuentran en la actualidad entre los treinta y cuarenta años, de la misma forma que cargan sobre sus hombros las andas del patrón cuando éste sale en procesión, que destinan un día a que sus padres estén con sus paisanos, que están pendientes casi diariamente de lo que aparece de su pueblo en internet; esta generación: ¡La leche que han mamao!. Mira por donde, es el orgullo de sus mayores y mantendrán el riego para que la sabia mantengan viva sus rices, del que fuese un pueblo alpujarreño que se llamaba Benínar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bién explicado todo.Lástima que todavía muchos padres y abuelos no se tomen en serio que si a estos pequeñajos no se le inculca todo lo referente a Benínar, entonces, si que habremos muerto como pueblo.
No hubo tiempo para todo...casi no hablamos.
Se tendría que organizar un campamento de verano,por lo menos de siete días,para hacer excursiones,jugar con los niños, cantar las canciones de siempre...
Todo lo que el otro día se hizo, pero con mas tiempo.
Que gracia hacía ver a M. Carmen,La Italiana, María le de Clara y demás...cantando y bailando "la chata miringüela".
El recinto está allí,solo es cuestión de pedirlo.Hay las parcelas para acampar.
Un saludo, Juan Gutiérrez.

paco maldonado dijo...

En línea a lo que terminas de plantearte, he puesto el siguiente escrito.
Haber si para el próximo enuentro se le ayuda a Plaza y puede aparecer, ...
Saludos.