domingo, 12 de septiembre de 2010

APEDREADOS

Abdula aparece periódicamente en casa para ayudarme en las labores de casa. Esta mañana ha llegado con la cabeza totalmente rapada, le digo que se diese la vuelta para verlo por detrás y esa parte del cráneo la tiene llena de cicatrices.

Me ha llegado el recuerdo de cuando los beninerillos nos citábamos en los alrededores de donde estaban las escuelas a las afueras del pueblo para jugar a aquellos juegos de antaño que también describe en su poesía un paisano (más o menos de mi misma edad yo más viejo por supuesto) bajo el seudónimo de eldi_blo.

Como norma, no en todas las ocasiones, pero sí en muchas, siempre se terminaba la reunión con un imberbe corriendo y una lluvia de piedras le perseguía hasta la entrada del pueblo. Por supuesto que no siempre le tocaba al mismo. Las rotaciones eran inevitables.

Casi todos los de mi generación si nos rapásemos la cabeza como Abdula, seguro que aparecerán las cicatrices de aquella forma de resolver nuestras diferencias. Uno corriendo y todos detrás lanzando piedras sobre aquel que había sido juzgado y condenado sobre la marcha. Yo que pensaba que era una característica beninera, resulta que es un recurso que también aparece en África y en otros lugares.

No deja de ser un comportamiento no del todo erradicado, puesto que he visto en la tele (eliminadas las piedras al alcance de la plebe) que en la conmemoración del día de Cataluña, al público se le ha distanciado cien metros más del año anterior, puesto que en los años anteriores, los insultos lanzados (que les causaban a los políticos el mismo daño que una pedrada) y los gestos, era el recurso de los indignados al no tener una piedra a su alcance.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Paco, yo le tiré un yesón a Antonio Blanco y él en vez de ir a que lo curaran, se fué sangrando a mi casa para pedir justicia. Estuve escondido en las chunbas varias horas, temiendo la reprimenda de mi madre. Dile que te enseñe la cabeza.

Que tengais buén viaje! Nos vemos el domingo!

Un saludo, Juan Gutiérrez.