viernes, 30 de abril de 2010

¿CONTIGO PAN Y CEBOLLA?. !NI MIJITA!.

Mi amigo Juan Gutierrez se escapó por los pelos al marcharse a los diez años de Benínar y por ello ni barcinó, ni lleno jerpiles de paja y los vacio en el pajar, ni saco estiércol (…). Olio, los olores de Benínar pero no se mancho las manos. A un niño no le da tiempo de ayudar en ciertos trabajos a sus mayores. Tampoco le daría tiempo para coincidir con aquella paisana que se había marchado del pueblo y sufre tal trasformación de refinamiento, que nada más bajarse del autobús, y al ver cagarrutas en la calle, pregunta: “Que son estos puntitos redondos negros”.

Mi amigo Juan como tantos otros mortales nos encanta un solomillo a la pimienta, una buena paletilla aunque sea de procedencia de cerdo ibérico, ni despreciamos un plato de jamón aunque fuese sacrificado dicho animal sin conocer la bellota.

¿Existe la ternura más palpable que un cordero?. Pues al horno de leña una pata de dicho animal es deliciosa.

En uno de sus comentarios dice, que Benínar no se debe de recordar por las zajurdas, por los corrales donde engordaban los cerdos, por el hedor que salía de ellas, por las nubes de moscas que siempre estaban encima del estiércol ni por el pestazo que desprendían cada vez que nos encontrábamos con un paisano que estaba acarreando estiércol, es decir limpiando un corral donde se engordaban a los cerdos.

Los que nos hemos criado en un pueblo como Benínar conocemos de primera mano, todo lo que conlleva convertir el cerdo enterrado hasta las rodillas en estiércol y que después se salan las manitas de cerdo, se pongan en el plato en un buen puchero, con trigo y con hinojos y que repitamos tantas veces como caldito queda en la olla

Se le encumbra, se le elogia, se le entierra en euros al dueño del Fuji, de Martín Berasategui, sale todos los días en los medios de comunicación cobrando lo que se sale de los cataplines por una costillitas asadas y a todas esas personas que intervienen desde que nace el cerdo, les alimentan, le ponen las vacunas, los transportan a los mataderos, los deshuesan (…). A toda esta gente además que se les paga mal, además se les coloca en la sociedad de los olores desagradables.

Amigo Juan, lleva a tu nieto Pau a coger huevos sucios de un corral de la Alpujarra. Que todos los huevos salen por el culo de las aves, el que se come el rey el ZP y el que yo me pongo con cebolleta tierna, aunque después le den los que se venden en el supermercado una manita de brillo, le pongan treinta sellos. Todos salen del trasero de las gallinas.

Que tus nietos sepan identificar el olor de una zajurda con el de un buen jamón serrano, los buenos huevos con yema de color intenso con el olor del gallinero.

LLévalo a una matanza desde el principio y que viva en directo lo que representa la muerte de unos animales para la supervivencia de otros. No lo conviertas en un "hipócrita". Si le gusta la carne, que sea consciente que delega por dinero en otros que realiza todos los movimientos hasta que le coloquen el choco a la plancha o las costillitas de cordero encima de la mesa.

Que huela el tufillo de cuando las matanceras están lavando las tripas para después llenarlas de embutidos.

Como curiosidad te diré que en España apenas se limpian las tripas para los embutidos, se mandan a terceros países que realicen el trabajo y una vez limpias se las compramos.

No me lo confundas de que los jamones haciendo “magia potagia” salen de una máquina o que un jurel de un kilo, a la espalda que lo pones a la plancha y salen sabores únicos por “arte de birlibisloque” (…).

Pau no consientas que tu abuelo haga como hacían las ancianas de Benínar cuando tenían que cumplir con la iglesia o con un entierro se cubrían con un mantón impregnados en alcanfor para camuflar todos los demás olores de los que olía su cuerpo de estar todo el día trabajando.

Pau mi niño, que los beniner@s somos una tribu y las tribus se distinguen una de otras por sus olores característicos. Tu abuelo conoce todos los olores, pero que no le dejes que te cuente solo los perfumes que en Benínar también había zajurdas.

martes, 27 de abril de 2010

EL ESPÁRRAGO DE LOS ABISPEROS

No pasamos nada con el espárrago que había en el huerto de mi casa al estar siempre lleno de abisperos. Se planteó cortarlo puesto que ocupaba mucho espacio del parral y además no se le sacaba provecho ninguno, ¡Pero!. El espárrago era intocable puesto que cada vez que había que llenar de flores el altar de la iglesia se colocaba en los floreros las flores de la temporada y ramitas del espárrago del huerto de Doloricas.
Por eso aguantó el espárrago mientras se colocaban flores en la iglesia.

De las uvas del cuerno yo tenía aquí en mi casa de Algeciras una parra pero se me perdió, pero mi primo Manuel Caceta me dio unos cuantos sarmientos. Los Planté, agarraron y la mitad de ellos están sembrados en Extremadura. Puede que no exista la casualidad ya que nuestro médico Don Emilio Duran Mediavilla era de dicha tierra.

Lo que he sembrado ya varias veces y se me seca es la hierba luisa cuando en el pueblo a todos los que le dolían la barriga acudían para que se les dieses unas ramitas. A los que estaban pachuchillos se les daban unas infusión de manzanilla que nacían entre las habas por este tiempo o de dicha hierba.

Otra de las utilizaciones era el cocer las los manojos de esparto en la balsa o en el pesebre.

Si Benínar existiese el museo del pueblo estaría sin duda alguna en la Molineta, justo debajo de mi huerto. Cuando zagal siempre para mí fue infinidad de investigaciones el cubo de y lo que estaba dentro del edificio convertido en gallinero.

Por último recuerdo perfectamente que en un olivo del Meloncillo mi padre me cogió un nido de pájaros carpinteros que yo los coloqué en una jaula de caña encima de las zajurdas.

Me pasaba parte del día cogiéndole cigarrones y chicharras como alimento básico hasta que llegó el día en que perdieron el plumón, les abrí la puerta y se marcharon.

Recuerdo cuando mi hermano llenó el huerto de colmenas.

Otro tema y éste sí que es el último. En el huerto se construyó el primer cuarto de baño que se montó en Benínar. Un lavabo, un váter y una ducha. Aún no había llegado el butano a Benínar. Todos los días se llenaba de agua un cántaro colocado en el terrado, que el agua lo calentaba el sol y cuando el agua estaba calentita nos duchábamos, en concreto José María en el año 1968 0 69 se duchó unos cuantos veces, ¿un poco antes de enamorarse de Maricarmen?. El resto de beniner@s al río donde se lavaban pero no se duchaban.

sábado, 24 de abril de 2010

¿CRISIS?. ¿PARA QUIEN?.

En un pis paz he tenido que ir a Jerez la ciudad que tiene más habitantes que la capital a la que pertenece. Esta vez de acompañante y como siempre con una libretilla dentro del bolsillo donde he ido anotando (como vi en TV que hacia el escritor José Luis San Pedro) comentarios que después van tomando cuerpo hasta convertirse en casi dos folios cada uno de ellos.

El primero que he anotado es que la mayoría de los ganaderos de reses bravas que hasta ahora las tierras de su propiedad las tenían destinadas a la cría de ganado de lidia, les han colocado un puñado de generadores eólicos que multiplicando el kilovatio producido por los días de viento, se pueden permitir el lujo de levantar un dedo de los cinco de la mano y decirle a todos aquellos que pretenden suprimir las corridas de toros: “Tiriri, tirirí, los crio pa mí”.

Si los ganaderos de reses bravas le han instalado en su finca un buen número, muchos generadores eólicos, “la crisis que se les viene encima que en Cataluña no le compren seis toros de lidia en la temporada”. Pues “van apañados, … me refiero a los catalanes”. ¿Conocerán los miles y miles de personas que están intentado arruinar a los ganaderos de toros de lidia, para que nadie le compre sus reses a los ganaderos que no lo van a conseguir?.

Otro de los comentarios que aparece en la libretilla es sobre los dos pantanos que aparecen a ambos márgenes de la autovía que están llenos, a plena capacidad. “Igualito, igualito que el pantano de Benínar, que se encuentra a un tercio de su capacidad y sigue desembalsando.”

De todo lo escrito en el viaje, no hago más que darle vueltas a la palabra crisis. Como les afecta a los ganaderos convertidos en productores de energía eléctrica y la crisis de los chatarreros.

He vuelto a ver en vivo y en directo las mismas imágenes de los años setenta de las furgonetas, las más viejas del mercado, llenas de todo tipo de chatarra por dentro y otro tanto de volumen amarrado en el techo entrando en el puerto de Algeciras con dirección a Marruecos.

Aquellos que habían arriesgado su vida cruzando en patera el Estrecho de Gibraltar, habían encontrado un trabajo dentro de la construcción, se habían comprado un buen coche, que volvían a su tierra en el verano a presumir ante sus paisanos de vivir en una UE la de la opulencia, los que antes les daban un trabajo ahora se lo niegan y ya sus hijos no son ni de aquí ni de allí, pero donde les gusta estar viviendo es aquí y necesitan comer, vestir y cargar el móvil, etc. Muchos se los están pensando, tantos como furgonetas cargadas de chatarra llegan a Algeciras con destino a Marruecos para volver al oficio que mejor conoce el padre de familia: El trapicheo.

Como los viejos elefeantes africanos que tienen memorizadas las rutas aún los primeros africanos que llegaron tiene en su cabeza memorizado, los lugares donde se encuentran los contenedores, donde tiran chasis de bicicletas, neumáticos, ropa usada, donde se la venden por kilos de la misma forma que los zapatos usados.

Los expulsados de la construcción y además se les distinguen a la legua por tener la piel más tostada que los europeos, van conduciendo una furgoneta indultada del desguace, han tenido que volver a sus orígenes a la chatarra, para volver otra vez de nuevo a comenzar y esperar que la crisis no se siga cebando en ellos.

domingo, 18 de abril de 2010

ELSIGNIFICADO DE CHOCHEO ES DISTINTO

Hoy que la Junta de Andalucía está gastando los euros que no tienen, en una buena cantidad de folletos, como si se tratase de competir, haber quien lanza el mayor número de ejemplares de propaganda con cualquier supermercado que se dejan encima de cualquier mostrador para que cada cual coja, papel que se ven sus imágenes, que casi nadie lee y lo deja en la primera papelera que encuentra.

Con los panfletos los supermercados intentan capta clientes, la Junta de Andalucía sobe la educación sexual de los que empiezan la adolescencia o están en ella.

Los abuelos actuales, en el que su formación integral fue entre los años cincuenta y sesenta se están estrujando la sesera cuando tienen entre sus manos, un libreto que sus nietos han sacado de su cartera donde se aborda el tema de la masturbación y demás flecos sobre la sexualidad.

Estamos escribiendo de unos españoles que uno de sus principios y el de toda su familia, era la honradez, la virginidad, la vocación, el esfuerzo, el recato y el respeto se consideraba en todas las clases sociales como condición indispensable e indiscutible para empezar unas relaciones de noviazgo; es más, si salía cualquier picardía sobre sexualidad en cualquier conversación vecinal las jóvenes tenían por obligación que ruborizarse, y si se insistía sobre el tema, los mayores solían decir: “Hay trapos tendidos”. Las mozas tenían que abandonar la conversación de sus mayores por su cuenta y si eran unas inocentonas, se les obligaba a que acudiera a sus quehaceres.

Ahora cuando sus nietos abren la cartera y se encuentran con dichos panfletos, tienen que mirarse los abuelos el uno al otro y se tienen que quedar perplejos al escuchar que dichos cuadernos se los han dado los maestros y en su cabeza intentando encajar: “¿Qué, sus maestros les están explicando en clase las imágenes que aparecen en dichos cuadernillos?”.

Existen temas en la enseñanza actual en la que los padres ambos trabajan y los abuelos son los que tienen que asumir ayudar a sus nietos en los deberes, que los políticos deberían dejar muy claro:
- La ayuda en los deberes a sus hijos en casa los tienen que asumir sus padres, estén o no trabajando, lleguen cuando lleguen a casa.
- Por respeto a la educación y forma de comportamiento a los abuelos, durante toda su vida, para no ocasionarle traumas, para no confundir a los nietos deben ser apartados por completo de ayudarle en sus deberes.
- En el currículum de la enseñanza de los que comienzan la adolescencia los padres deben ser escuchados.

Los políticos se han tomado la arrogancia que como “la mitad de la población, eluden la orientación o educación en este sentido a sus hijos”: Al carajo la ética, la moral, la vocación , el esfuerzo, e incluso los principios religiosos, que cada alumno está recibiendo en sus casa, a esta generación se le impone “lo políticamente correcto, es decir los principios sobre la ética, la moral, (…), se le da la versión sobre qué opina la clase política en cada legislatura, sin pensar para nada que cada sociedad es identificada por sus principios, entre ellos sobre la espiritualidad”.

Estamos entrando en una sociedad en la que aparecerá la frase:
“La teoría que tenían mis mayores, sobre la forma de ser y actuar en la vida, se murieron con ellas ¿basadas en la sinrazón?”.

Todo un paso de gigantes en el comportamiento del ser humano donde el respeto y creencias de los mayores, pasa a ser papel mojado y de escasísima utilidad que es pisoteado delante de las propias narices de los mayores.

Ya la palabra chocheo no depende de la edad de la persona mayor, el calificativo se lo ponen sus nietos, los mocoso que empieza a cambiársele la voz.

miércoles, 14 de abril de 2010

ROGATIVAS.

A la lista de las peticiones que todos los años realizan los beniner@s
a su patrón (y ahora que llega San Marcos) cada vez que lo sacan en
procesión por el carril forestal desde el camping hasta la curva desde
donde se contempla el pantano se tienen que ir mentalizando para
colocar en el frigorífico justo al lado de la lista del supermercado
imágenes para que la gente joven retengan en su retina, que nuestro
pueblo estaba llena de bancales donde estaban los árboles frutales y
los huertos donde nacían todas las vituallas que se compran en los
mercados.

Que Benínar no es un pantano y un pinar.

Tenemos que pedir rogativas:

- Que los ingenieros de montes responsables de la repoblación de todo el Valle de Benínar cambien de comportamiento. San Roque bendito cambia su mentalidad y que en el vivero que tienen en el Llano de Darrical planten los árboles autóctonos de la Alpujarra. Que actuaron y siguen actuando de la misma forma que en tiempos de Franco, cuando sembraron de pinos a los dos laterales de la carretera que salía desde el Puente del Rio hasta el mismo Aguadulce y que dicho sea de paso todos fueron arrancados y los que quedan de aquella siembra se pueden contar con los dedos de la mano y que quede escrito que no sembraron árbol alguno en el lugar o al lado del pino arrancado.
Pedirle a nuestro patrón que los perdonen por no trasplantar los olivos centenarios y sí, sembraron eucaliptos.

- San Roque bendito que no aparezca un desaprensivo con intenciones incendiarias, puesto qué, sería otro golpe más para los beniner@s que quedamos, ver nuestros cerros cubiertos de cenizas.

- Que nuestro valle sus cerros se parezcan al paisaje que nos encontramos cuando llegamos a Turón, andamos toda la Contraviesa o contemplamos la Alpujarra desde el primer collado que nos encontramos saliendo de Murtas con dirección a Cádiar.

- Infunde en todos los descendientes de los beniner@s que cuando acudan al camping del Cerro de la Viñas lo que desde allí se contemplaba era un valle lleno de árboles frutales y de huertos llenos de hortalizas. Que no se conformen en lo que han transformado la herencia de sus mayores, que Benínar no se puede resumir en un paisaje transformado en un pantano escacharrao y a un pinar abandonado.

- Para todos aquellos incrédulos; no creyentes; agnósticos; los ni fu ni fa ni todo lo contrario; a los que les da lo mismo y contestan con una subida de hombros; para los que ponen obstáculos en las ruedas que van girando, etc, infunde en ellos, nuestro patrón, al menos en qué partido político (todos aconfesionales) han de cotizar para influir sobre la reconstrucción del Valle de Benínar.

sábado, 10 de abril de 2010

CON LOS PELOS ERIZADOS.

Como escribe el sevillano Antonio Burgos en sus dos libros sobre los gatos:
“Son los que se están convencidos desde su nacimiento que la casa les pertenece (no como los hipotecados que saben que les pertenece al banco) y dentro de la casa escogen sus espacios que los defenderán siempre ante cualquier invasor y de todos los humanos de la casa será uno el elegido para colocarse en su regazo, para llegar al sueño profundo, que siempre acudirán a él para que les sirva la comida y el agua”.

En mi casa viven también tres perros que llegaron después que ella, que es de suponer que conforme fueron llegando les fijo sus espacios, mejor dicho les asignó donde podían estar y donde no podían entrar. Les exigió que se apartasen por el camino trazada por ella y que ellos llegaban a su casa, y, por tanto, nunca se les olvidase que ella era la dueña, y, que ellos estaban allí de prestado. Dicho tratado es repasado con la mirada y con los gestos todos los días cuando se cruzan, aunque se encuentren veinte veces al día. Algo parecido a lo que ocurre en el Poniente Almeriense con los que se han asignado ser los indígenas y los foráneos.

En mi casa se puede decir el dicho asignado a los Reyes Católicos: “Tanto monta, monta tanto, (…)”. Yo me siento el rey en las parcelas propias y mi gata es la que tanto al levantarse como al acostarse se da una vuelta por la parcela, por toda la casa y hasta por los armarios.

Por lo que me temo que pueda ocurrir, nada más levantarme, todos los días, cojo la gata, la pongo en mi regazo y le digo lo más serio que me puedo poner, como le diría Fernando a Isabel:

- Me da igual que te laves, que te asees, que no te cambies de ropa interior; pero como se te ocurra subirte a la mimosa donde han puesto su nido los ruiseñores y lo destroces, seguro que nuestras relaciones cambian por completo. Llamo al 091 para que te metan en la cárcel.

Con lo traumatizado que estoy por haber nacido, vivir en Benínar y contemplar en vivo y en directo la llegada de las máquinas para la construcción del pantano, que lo primero que hicieron fue arrancar los árboles donde anidaban, los ruiseñores, los jilgueros, los pichotes, etc. y continuaron rompiendo las casas donde anidaban las golondrinas. Volver a vivir la destrucción de un nido, en mi casa, sería como volver a escuchar la llamada en mi puerta de los tasadores con sus argumentos de tener que abandonarla.

jueves, 8 de abril de 2010

NO CONSIGO ADAPTARME.

Tengo un compañero de carrera que nada más pisar la universidad, le engatusaron cuando asistió a una conferencia, en el que el tema en cuestión hacía referencia a “los campos magnéticos y las corrientes subterráneas, su influencia sobre los seres vivos”.
Con el paso del tiempo ha ido recopilando datos y libros sobre dichas cuestiones y en la actualidad, cuando se pone a argumentar datos sobre el tema a los que les escuchan los deja con la boca abierta.

Otro compañero extremeño me decía que gran parte de los pueblos construidos en los últimos años del franquismo en Extremadura habían sido abandonados.

Otro dato. De los primeros pobladores de San Agustín (pueblo que le dieron a elegir a los benineros cuando lo expulsaron de su pueblo), preguntando a paisanos, me decían que los que estrenaron las viviendas en su gran mayoría se habían marchado.

Los ruiseñores que escucho mientras estoy escribiendo son los que me han planteado:
¿L@s beniner@s, un@s que fueron emigrantes y otr@s que fueron expulsados de su pueblo una vez que ya sus hij@s son mayores y vuelan por su cuenta, contemplando el nido vacío como les ocurre a las golondrinas, el entorno no les queda demasiado grande?.

Somos seres que mientras vivimos, entre la bioquímica las caídas de tensión y por ello la corriente eléctrica, es lo que nos mantiene en pie. A su vez el magnetismo tiene influencia importantísima sobre ambos conceptos. Un follón, pero decisivo sobre la calidad de vida de los seres vivos.

Seguro que toda la tarde estaré tarareando y pensando en la canción de Andrés Calamaro: Volver (con la frente marchita).