sábado, 15 de diciembre de 2018

Noches blancas de hospital


Cantaba José Luis perales casi cuando yo terminaba la adolescencia una canción para la navidad que se escucha poco pero aun no se ha olvidado.
Esta villancico lo relaciono cuando mi coro fue a cantar a la capilla del hospital de donde vivo y dio la casualidad que se había muerto un marinero hacía una hora y su familia fue a la misa. Cuando sus familiares escucharon aquella canción recuerdo los rostros desencajados de su viuda, de sus hijos y amigos.

Navidad es Navidad
toda la tierra se alegra
y se entristece la mar.
Marinero ¿a dónde vas?,
deja tus redes y reza
mira la estrecha pasar.

Marinero, marinero
haz en tu barca un altar.
Marinero, marinero,
porque llegó Navidad. (BIS).

Noches blancas de hospital
dejad el llanto esta noche
que el niño está por llegar.

Caminante sin hogar
ven a mi casa esta noche
que mañana Dios dirá.

Caminante, caminante
deja tu alforja llenar,
caminante, caminante,
porque llego Navidad.

Ven soldado, vuelve ya
para curar tus heridas,
para prestarte la paz.
Navidad, es Navidad
toda la tierra se alegra
y se entristece la mar.

TÚ, que escuchas mi mensaje,
haz en tu casa un altar,
deja el odio y ven conmigo,
porque llegó Navidad. (bis).

Mientras el coro murmulla alguien está leyendo
Y en la Misas del Gallo
los coros desgarán sus cuerdas
y, extasidas ante el Cristo que nace,
una madre reza por su hijo,
que, fuera de casa, sentirá tristeza:
y los ojos del hijo esa noche
llorarán con ella.

Tú, que escuchas mis mensajes
haz en tu casa un altar,
deja el odio y ven conmigo,
porque llegó Navidad.


Nota:
Son veinticinco años dentro de un coro parroquial y son muchas las canciones rocopiladas lo mismo que los Villancicos. Los iré poniendo. Cada uno de ellos (como este del marinero recién muerto) otros tienen el propio.