miércoles, 5 de enero de 2011

QUERIDOS REYES MAGOS.


Por ser el penúltimo día de poder cantar villancicos. Por ser el día en que los niños algecireños salen de sus casas arrastrando una ristra de latas y se concentran en el puerto donde llegan en barco los Reyes Magos. Por terminarse otro periodo más de tiempos de añoranza y mucho más.
Este villancico de "vengan pastores, ...,", como el de "campanitas que vais repicando, ...," quizás sean de los que más pasión los que en estos días cantamos a la Navidad.
Este villancico lo aportó al coro una compañera que la identificamos como Carmen Campillo.
Al ser una prolífera poeta y tener en el coro varias canciones suyas, éste en concreto, el que aparece, no sé si fue inventado por ella o lo aprendió en su pueblo: Campillo. Málaga.

Ya llegan los Reyes Magos
los he visto por el río,
traen montañas de regalos
vienen cargaitos perdios,
al pesebre vienen a dorarlo,
traen oro incienso y mira
al portal van a llevarlo,
y van a llevarlo.

Estribillo:
Vengan pastores, vengan al portalillo,
traigan se los tambores, guitarra y bombo
que en el portal vamos a contemplar:
Que María esta bailando,
San José taconeando
y el niño que está en la cuna
las palmas está tocando.

Mi padre toca el pandero
y mi madre la guitarra
y mi hermano el pequeño
dando to el día la tabarra,
y el abuelo, baila que te baila,
Ya estamos to los pastores,
pues ha venio mi hermana,
ha venio mi hermana.

Estribillo.

En el pueblo hemos decidido
entre todos hacer un belén
y hasta el alcalde ha venio
pa su figurita poner
y al momento de enchufar las luces
se ha quemao el pesebre
y hasta San José, hasta San José.

Estribillo.

Traigo unos mantecaitos
traigo unos tragos de vino
y este que viene conmigo
está borracho perdio.
Cuando mi madre lo vea
no vea lo no se que le dirá,
le diré que le deje
que estamos en Navidad,
estamos en Navidad.

Estribillo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Paco, un villancico muy bonito. Gracias por ponerlo.

Juan Gutiérrez.

paco maldonado dijo...

Ya mismo comenzamos con los carnavales.
Afila el lápiz. Nos metémos la puntita en la boca (¿Cual era la razón de realizar aquel gesto?) como hacíamos cuando estábamos en la escuela en Benínar y comenzaremos a escribir en forma de carta para todos aquellos que estaban fuera del pueblo los carnavales que se habían perdido.
Un abrazo.